Regresando del trabajo, hace dos días, la tierra de las flores, de la luz y del amor me regaló una preciosa tormenta y RNE-clásica emitió una pieza de Peter Heindrich, en la que se reinterpreta el "Cumpleaños Feliz", según Bach, Haydn, Mozart, Beethoven, Wagner, tango, rapsodia,...en fin, hasta 15 variaciones. No la conocía.
Entre nubarrones amenazantes y algún relámpago, y una lluviaquenocesa en los cristales, se me hizo una sonrisa y un momento-tesoro. Y venga a darle vueltas al asunto...que digo yo, que existen TANNNNTASSSS variaciones de nuestros eventos vitales y nuestra cotidianeidad como queramos hacer.
Podemos vivir una vida wagneriana, chopiniana (¡qué piano, Dios mío!!!!), sincopada como el jazz, vida tango, disfrutar el pop y...aún más, hay veces que la vida se vuelve impresionista (tal vez, Van Gogh), cubista, ó flamenca (y aquí, la obviedad de las segundas intenciones). Ahí viene lo que elegimos, según sentimos y según necesidades.
Y me acuerdo de un estudio fotográfico de la Torre Eiffel que enmarcó mi padre y acompañó mis cumpleaños hasta que salí de casa, en que la torre asomaba desde infinitos ángulos. Y me requeteacuerdo de mi padre, y su consejo : "No te olvides de sonreír, hija". Me gusta ser mujer de sonrisa fácil. Aunque la sonrisa lo que muestre sea una gran desolación, un infinito cansancio ó un júbilo enorme. Y esta semana encontré a un compañero de trabajo al que hace años que no veía, y me saludó diciendo : "No estaba seguro de si eras tú, hasta que he vuelto a ver esa sonrisa". Y es que las sonrisas no tienen canas/mechas, ni arrugas ni curvas. Y después....mucha creatividad para seguir probando la reinterpretación, porque hay cosas que ya quedaron escritas en mi pentagrama.
Feliz luna llena (también variaciones, al fin y al cabo).
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6 comentarios:
Jo! yo quiero un amigo como el tuyo. Nunca me han dicho algo así, más bien al contrario, alguna vez me acusan de llevar cara de Guardia Civil...¡que le vamos hacer! En fin...
¡Vaya momentazo el de la tormenta!
Una auténtica suerte que te envidio sanamente. Adoro las tempestades.
Y en otro orden de cosas, cuando hablas de curvas, ¿te refieres a este cinturón blandito que me rodea la cintura? Pues que sepas que con lo de años que me ha costado hacerme con él, no pienso desprenderme de él así como así ¡Vaya!.
Dice una amiga muy sensata que tengo, que con los años, la falda va bajando, el pelo subiendo y en la cintura una goma, para que entre todo...jajaja!!
Ay! Esperanza, no cambio ni una de mis arrugas o mi "sabiduría" por nada del mundo. Vivo como un logro la sensación de haber llegado hasta aquí. No volvería atrás ni para tomar impulso.
A ver si las musas me acompañan e intento ese texto que me pides. Me pareces genial, y tu padre me cae de p.m. Un besazo preciosa.
Qué prosa más poética!!
Me encanta tu pensamiento. Aunque también me apena lo del pentagrama. Nada nos liga a lo que hicimos, nos hicieron, como fuímos o pensamos en algún momento del pasado.
La vida siempre comienza ahora ... y menos mal, porque sinó no sé qué sería de mi.
Una sonrisa enorme para ti!! Una tormenta de eléctrica, en la que los electrones son sonrisas y el aire la distancia de lo que no enseñamos.
Un abrazo
Chuff
La naturaleza tronado con ritmos propios...
Esa sensibilidad me abruma.No había oído la comparación que has hecho nunca, pero tienes mucha razón, mucha.
Una tarde de Bramhs.
Besos!!
Bueno, CRISTAL, pendiente el tema de las curvas, pues...sin "tengoques", por favor. Ya saldrá!
Gracias, por pasarte, ALFONS, y bienvenido. Mis pentagramas llevan una bella melodía y, de alguna forma, son un legado. Y desde ahí, al fin del mundo.
ZEN, muchas gracias por tus electrones. Chuffs desde el mediterráneo. Y besos desde mis pentagramas.
La naturaleza a su ritmo...cierto, ALMA.
Besos de Chopin, querida LIBERTAD.
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