jueves, 23 de octubre de 2008

calor

Me preguntaban por qué voy a disfrutar mis vacaciones AUN pendientes persiguiendo la primavera y el calor estival.
De mayo a octubre se me hizo tan breve y tan denso, que no pude recoger lo que todos los años me trae mi cumpleaños : un poquito de calor. Simplemente, queda ahí y yo transformo esa energía y la administro hasta el año siguiente.

A falta de energía, he tomado la decisión de invertir en mí misma, que aún no cotizo en bolsa pero fluctúo. Y antes que la fluctuación sea catastrófica, me apunto al ahorro energético y marcho de viaje unos días. Un viaje requetesoñado y en el que espero recoger de la naturaleza todos los momentos que ofrece, vivir en aquí y ahora, contemplar espectáculos sin entrada ni más aplausos que la emoción. Un viaje planeado, con la complicidad de buena gente, aunque iré conmigo que no sóla (un beso para Uma).
Y atender mi parte interior, abandonada ultimamente.

Me muero de la ilusión y cuando recogí ayer los billetes, me temblaban las manos. Faltan unos días...

lunes, 20 de octubre de 2008

entre ( ) paréntesis

¿Estás bien?



(¿Estás?)



(¿Eres?)



¿Eres feliz?

el día del lazo rosa

Y no quiero marchar a dormir, sin anudarme en rosa.

Por la incertidumbre del comienzo, por la contundencia del diagnóstico, por lo agresivo del tratamiento, por las lágrimas caídas con cada cabello que perdiste, por la vulnerabilidad de la piel estropeada y reseca, por el pánico ante la intervención (la primera y la segunda), por el dolor ante el espejo, por el valor con que seguir viviendo, por el coraje en tus visitas de seguimiento,...por celebrar antes (por si acaso) y después (por la alegría) de cada control que sigues viva.

Gracias por dejarme compartirlo, madre; no sabes cuánto te quiero.

domingo, 19 de octubre de 2008

encuentro

Pues conducía hacia mi trabajo y el sol, a mi izquierda, insistía en acabar de asomar entre nubes y calima. Y le dí los buenos días, como hago cada mañana.
Y, a mi derecha, descubrí a la luna, pálida, comenzando a menguar. Alta, alta, aún en el cielo, a la vista de todos. Desnuda y descarada, esperando que acabara de salir el sol, para saludarlo y acariciarlo, para hablar con él, preguntarle cómo le va la vida. También le dí los buenos días (en vez de las buenas noches).

Y pensé que era afortunada, de encontrar ésto, camino del trabajo, un día de guardia, como presagio para obtener cosas que parecen imposibles, como muestra de que ser opuestos no es ser enemigos, como señal de que el día traerá encuentros impensables. Y hubo visita sorpresa, y así pude compartir el espectáculo (en diferido) y los sentimientos generados. Desnudando con descaro los sentimientos, como la luna, para sentirme brillar, como el sol. Y es que hay gente que debe llevar en la agenda del alma cuando hay alguien que agradecerá diez minutos de buena compañía, y las palabras oportunas.

Y, ciertamente, fue un buen día, y una buena noche.

(Dejo para otro momento el golpe, que recibí en el coche, en una p... rotonda, cuando ya salía del trabajo, de buena mañana; y es que ése fue otro día)

domingo, 12 de octubre de 2008

paul newman (1925-2008) VS mickey mouse (1928-nisesabe)

Existe una raza de hombres que yo llamo "hombres Mickey Mouse" (aprendido de mi tío John, nacido Bautista).

Igual conoceis alguno, y lo sabreis porque desde que nacieron llevan puesto su pantalocito rojo, y sus guantes blancos (por aquello de enmascarar el contacto, seguramente, aunque éllos no lo saben). Permanecen en una eterna adolescencia, paseando con los amigos y haciendo manitas con la novia (que también lleva guantes). No viene en su guión el tomar decisiones, ni esas crisis que nos hacen crecer sin cambiar nuestra esencia. No les salen arrugas ni canas (porque si éllos no las miran, nadie las ve), ni cambian su indumentaria, salvo, ocasionalmente, atarse una corbata de lazo al cuello, que se quitan porque acaba estrangulándolos. Bueno, también usan "canotier" en eventos señalados, y no sé si para que no se les salgan (ni les entren) las ideas por el último chakra, con lo bien que están así. Conversan de forma estereotipada, absolutamente previsible. Y no se salen del diálogo; en caso de desconcierto, elevan un hombro, ladean la cabeza, abren los brazos y ríen. Y,lo más trágico, pase lo que pase hoy, al próximo episodio, todo estará en el mismo punto de partida, ó sea en ningún sitio.

Y no puedo evitar acordarme de Paul Newman; y es que Dios existe y creó muchas razas de hombre para que el ser humano no desapareciera de la faz de la Tierra ó quedará congelado como dicen que permanece el "padre" de Mickey Mouse. Muchos besos para Paul Newman!!!. Sé de él por el mundo del celuloide y alguna revista de color (rosa, amarilla...), pero siguiendo su cinematografía me parece ejemplar la forma de adaptarse al proceso de la vida, y la capacidad de mostrar (y demostrar) lo que uno es en cada momento con tanta congruencia. Y despedirse de esta vida dignamente, porque nada pasa por casualidad.

P.D. Escribiré de la raza "Daisy", pero hoy no.

platano

Decía uno de mis hijos el otro día que no quería que le prepararan la comida en el cole cuando salen de excursión. "Es que ponen plátano de postre y todo sabe a plátano".

¡Pero qué listos son!. Hoy estoy con la idea metida entre las cejas; y con el sentir de que, a veces, la vida sabe a plátano. Un acontecimiento entre muchos...puede oler de forma que enmascara el sabor del resto de la vida. Y al comenzar a comerme el día, en ocasiones, me encuentro algo entre la pituitaria y el paladar, que me no permite disfrutar de mis sentidos ni de mis emociones.

Yo tampoco quiero comer lo que me preparan en el cole.

viernes, 3 de octubre de 2008

letra y música

Echaba de menos a mis compañeros en los pentagramas; hace unas semanas que no canto por cortocircuíto estratégico. Pero quería verlos, un saludo nada más, a la entrada del ensayo...y un poleo diez minutos antes.

Y me ha hecho tanto bien...

Allí estaban éllos, con partituras, lápices y sonrisas. Y el dire...con esas chispas en los ojos y ese "no te preocupes", "ven pronto".


Subí a casa cantando, con corcheas pegaditas a los poros de la piel y respirando con el abdomen, conteniendo el aire para no ahogarme cuando viene una nota larga. ¡Cuánto enseña la música!.



Y pensaba que lo frecuente es seguir la secuencia de poner música a la letra. Soy de pensar, y elaborar, y repensar...y cuando el argumento está construído, voy a por la música.

Y me doy cuenta que, ahora mismo, estoy en un momento de mi vida, en el que no necesito argumento para elegir. Es al revés, tengo la melodía a la que poner letra, y armonización, e incluso acompañamiento (Piano, cuarteto cuerdas, banda u orquesta completa...). Y no tengo la letra, y no pasa nada, y me siento bien, escuchando la música de mi vida.



Esta vez, de las pocas que recuerdo en mi vida, me muevo con mi música, a contratiempo, improvisando, DISFRUTANDO sin letra.

Para la sonrisa de mi director, para los tres sintenores, y para todos los scholapiarum.